Una novela nada convencional en laáque la estrecha vida conventualcontrasta con los excesos de la vida palaciega. A través de laperversa (y, a la vez, inocente) mirada de unas monjas que juegan aáno ser monjas, construye Cristina Sánchez-Andrade este original relatoen el que la estrecha vida conventual contrasta con los excesos de lavida palaciega.Una abadesa excéntrica y resentida, cuya misteriosamuerte es anunciada desde las primeras páginas, un fraile que haagotado su vida buscando a Dios por la vía de la razón, un marquéspendenciero, su esposa, doña Hilda, que va al convento a jurar suvirginidad, un extraño lacayo que hace pelotas de papel, una cocineraque aspira a ser marquesa y, finalmente, el Rey que ya no pisa latierra, son los personajes que van entretejiendo esta intrigantehistoria.Una novela nada convencional, escrita con una prosa sensual y lírica, en la que la soledad, el desamparo, la dura tarea de ser, lalibertad y la búsqueda de la identidad personal aparecen como telón de fondo.