¿Por qué determinadas narraciones nos fascinan? Las infografías de Isabel González tratan de responder a esta pregunta mediante formas, curvaturas, distancias, longitudes. ‘Geometrizan’ los cuentos. Permiten mirarlos. Casi tocarlos. Establecen relaciones entre los elementos visibles e invisibles de la historia. Corporeizan los trucos y encarnan las abstracciones de relatos tan míticos como El Aleph, El nadador o La lotería hasta el punto de trazar una narración paralela. La geometría de los cuentos refleja todo el tortuoso proceso: bocetos, esquemas, apuntes, tachones. El delirio completo y minucioso de la realización de infografías literarias.
Estas trece infografías descuadran los relojes de la costumbre lectora. La imagen se subleva para, contra los pronósticos de la historia y la tradición, convertir el tiempo de la palabra y sus relatos en el espacio de una cartografía secreta. No son mapas que oculten como en los libros de piratas un tesoro. El mapa es ya el tesoro y el aventurero osado encontrará que su brújula enloquece porque todos los lugares son el norte.
Cabe el mundo entero en los cuentos de Sherezade, Borges lo encerró en un pequeño espacio de unas escaleras de Buenos Aires e Isabel lo dibuja en una gramática de gráficas geometrías. Hubo sabios que nos enseñaron a leer estos cuentos. Hoy queremos también aprender a mirarlos. Nunca antes la geometría había servido tan eficazmente para quitarle el velo de familiaridad a las historias que nos estaban esperando desde el otro lado de las cosas.