Y yo caminaba y caminaba detrás de ti como una abeja que no encuentra su or, caminaba y tú te perdías ante mi ser nocturno mientras el balanceo de una sombra rezaba implorando la salida del sol.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información